Corría el verano de 1959 y al igual que en casi todo el mundo, en la fronteriza ciudad de Nogales Sonora, al noroeste de México, se dejaba sentir el impacto del ritmo enloquecedor del rock n’ roll. Después de algunos intentos que fallaron, pero animados con la presentación de un grupo llamado "Los Chips" que estaba de paso en gira desde el sur de la república, que sonaban bastante bien solo que incluían entre sus instrumentos algo imperdonable para un grupo de rock n’ roll : un acordeón; ante tal visita, unos chavos nogalenses integraron un grupo. Ellos eran: Manuel Caballero, Higinio Navarro, José Tapia, Clemente Trujillo y Humberto Pedraza. Al grupo lo bautizaron con el nombre poco rocanrolero de "Blue Moon" e hicieron algunas presentaciones, pero pronto Manuel Caballero (guitarra), se quedó solo, luego se le agrega Ricardo Torres (con una tarola) y ambos invitaron a Rafael Gonzalez a unírseles. Empezaron dos presentaciones semanales en una radio local, todo en vivo con los consiguientes errores, se agregan Amado Manriquez (piano) y Homero Calles (vocalista), de estancia efímera, si acaso un mes cuando mucho. No había bajo ni bajista, posteriormente Manuel compró cuerdas de bajo y se las puso a su guitarra. El público les dió la bienvenida de manera cariñosa pues ya había un conjunto formal de rock en Nogales… pero el nombre estaba muy en desacuerdo y después de un concurso con la participación del público, surgió el nombre de Los Jets. Sale Homero y se invita a Leslie Royal (cantante afro-americano de Nogales Arizona, que pertenecía a un grupo vocal tipo Doo Wop, llamado The Sinners, y que nada tiene que ver con el grupo mexicano del mismo nombre, de esas coincidencias que se dieron en esta etapa del rock).